martes, 8 de julio de 2008

Reflexiones

LA SATISFACCIÓN DEL DEBER CUMPLIDO

Jorge Meléndrez

El día de ayer viernes 4 de julio por la tarde, en el Auditorio de la Universidad de San Miguel, se celebró la ceremonia de Graduación de la primera Generación de Licenciados en Administración de Negocios, una licenciatura que como comentábamos en esta misma esquina reflexiva la semana pasada, fue diseñada especialmente para personas adultas que en algún momento de su vida, pudieron pensar que era imposible hacer una carrera profesional, la que fue diseñada bajo una modalidad de una materia por mes, con clases diarias de dos horas y media y con una metodología de aprendizaje tutorial y antologías como material de estudio.

Tuvimos la oportunidad de darles un mensaje de despedida dentro de un ambiente de emoción de cada uno de los graduados y sus familiares y amigos, que fueron testigos de honor de este importante acto en su vida.

Ahí, tuve oportunidad de felicitarlos y desearles lo mejor del mundo, pues se lo merecen como personas que supieron tener un sueño y sobre todo, mantenerlo y no desenfocarse en el logro del mismo. Ellos son el mejor ejemplo de lo que el hombre puede hacer cuando se define metas de vida.

Entre otras cosas, les dije: “…Los felicito por haber cumplido con uno de sus anhelos más deseados, con un sueño de vida en su edad adulta, con una meta que pudo haber parecido inalcanzable hace unos pocos años, pero que hoy es una realidad. Darse para si mismos, una carrera universitaria.”

“…De igual manera, les exprese mi agradecimiento por haber elegido a la Universidad de San Miguel como su institución de estudios profesionales, con la seguridad de que hemos hecho lo mejor posible por formarlos en una carrera empresarial dentro de un humanismo integrador, y conocimientos de vanguardia.”

“Sabemos que no nos defraudarán, pues a pesar de que el mundo que les espera esta lleno de retos, también lo está de oportunidades y ustedes con su experiencia de vida laboral y sus conocimientos adquiridos, sabrán hacer el mejor papel en sus responsabilidades como profesionistas.”

Les recordé: “…hace tan solo tres años y algunos meses, ustedes llegaron llenos de incertidumbre, dudas e ilusiones y hoy, los reintegramos al mundo laboral más maduros, con muchas más ilusiones y con menos dudas e incertidumbres. A ustedes, les extiendo mi mano y les confirmo que cuentan con un amigo que los apoyará siempre de manera incondicional, pues como rector de la universidad, me siento muy orgulloso de todos ustedes, que han demostrado ser capaces de plantearse metas y proyectos de vida, y sobre todo, de emprender acciones en busca de su superación personal y profesional.”

“Créanmelo, en estos tres años y ocho meses, cada uno de ustedes han sido importantes para todos quienes tenemos una responsabilidad dentro de la universidad, sobre todo, de los profesores y directivos, ya que los hemos visto crecer emocional y espiritualmente.”

Se les dijo también que todo lo que hoy han logrado debe servir de ejemplo para muchas otras personas, por lo que “…son el mejor testimonio del origen y el inicio de una de las carreras que nació para darle a personas adultas como ustedes, una oportunidad de vida profesional, y con ello, demostrar que con voluntad y fortaleza de carácter, y sobre todo con un entorno educador propositivo, se pueden lograr las metas propuestas como proyecto de vida.”

“Por ello, deben cuidar la integridad de las demás personas y en particular, cuidar la integridad de su persona, ya que esto constituye un aspecto toral en el futuro de sus vidas. Todos debemos aprender a ser personas íntegras en todos sentidos, y la mejor fórmula para robustecer nuestra integridad, es trabajar en nuestra vida interior, en el respeto a las demás personas y ayudar a otros a crecer emocionalmente.”

“Que no pierdan la capacidad de asombro frente a los graves problemas de la desigualdad existente, y sobre todo, que cultiven hábitos de vida que les den la fortaleza necesaria para desempeñarse con ética en el entorno social y profesional donde actúen.”

Con estas palabras y algunas recomendaciones, despedimos de las aulas a estos alumnos pioneros en esta licenciatura, con la satisfacción del deber cumplido para bien ellos mismos y sus familias. JM Desde la Universidad de San Miguel.

udesmrector@gmail.com